Comprensión de la modernización de aplicaciones: descripción general

Modernizar las aplicaciones heredadas resulta siempre fundamental en los entornos empresariales contemporáneos, donde la escalabilidad, la adaptabilidad y la agilidad son necesarias para el éxito.

Debido a la transformación digital Actualmente emanando en toda la industria, a las empresas se les presentan infinitas oportunidades de crecimiento y creación de valor en los mercados actuales y futuros.

En una época marcada por adopción digital y cambio transformacionallas empresas han optimizado con éxito sus operaciones y han brindado resultados excepcionales. experiencias del cliente aprovechando tecnologías avanzadas y redefiniendo los enfoques convencionales.

Está claro que la irrupción de tecnologías nuevas y novedosas (por ejemplo, IA, blockchain y computación en la nube) está acelerando la velocidad a la que se logra el progreso, y los tomadores de decisiones empresariales y ejecutivos saben muy bien que no hay otra alternativa que aceptar estos cambios.

La modernización de aplicaciones encarna este enfoque proactivo, garantizando que las empresas utilicen plenamente sus capacidades de software y las alineen con los requisitos comerciales actuales y emergentes.

A la luz de Encuesta sobre el estado de la estrategia en la nube 2023 de HashiCorpque encontró que el 76% de los encuestados estaban implementando, ampliando o planificando una estrategia de múltiples nubes, las empresas que se encuentran en proceso de modernización de aplicaciones reconocen la importancia de la integración de la nube para respaldar sus requisitos tecnológicos en evolución.

En este artículo, presentamos una descripción general detallada de la modernización de aplicaciones, que abarca su definición, la importancia de actualizar las aplicaciones heredadas, los métodos de evaluación y las estrategias para una modernización exitosa. También examinamos tecnologías esenciales que ayudan a las organizaciones a adaptarse y prosperar en entornos tecnológicos contemporáneos.

¿Qué es la modernización de aplicaciones?

La modernización de aplicaciones es la revitalización de sistemas de software heredados para aumentar sus capacidades, mejorar la compatibilidad y adaptarse a las necesidades empresariales contemporáneas. La modernización de aplicaciones, a veces denominada modernización heredada, implica reemplazar carteras de aplicaciones inflexibles en el sitio con arquitectura de software, lenguajes e infraestructuras de plataforma actualizados que reflejen las prácticas de desarrollo modernas.

El objetivo principal de la modernización de aplicaciones es optimizar los activos de software existentes mediante la incorporación de tecnologías de alto valor diseñadas específicamente para las necesidades y objetivos únicos de una organización.

Estas tecnologías abarcan computación en la nube, inteligencia artificial, microservicios y otras soluciones avanzadas que tienen el potencial de fomentar la innovación y mejorar la adaptabilidad dentro del panorama de las aplicaciones.

MarketsandMarkets revela que se prevé que el tamaño del mercado de servicios de modernización de aplicaciones se expanda desde De 15.200 millones de dólares en 2022 a 32.800 millones de dólares en 2027, registrando una tasa compuesta anual del 16,7% durante el período previsto..

Los métodos de modernización, como el cambio de plataforma, el realojamiento, la reestructuración, la reingeniería y el reemplazo, atienden a diferentes complejidades, costos e impactos en los sistemas existentes.

¿Qué motiva la modernización de aplicaciones?

Los desafíos complejos y costosos asociados con la transformación de aplicaciones monolíticas, incluida la reestructuración arquitectónica, el cambio de plataformas, el escalado y la actualización de aplicaciones, representan las motivaciones más importantes para emprender la modernización de las aplicaciones.

Las aplicaciones suelen diseñarse con parámetros específicos, lo que dificulta las integraciones, la interoperabilidad y la comunicación fluida en entornos empresariales que dependen de la maniobrabilidad y la agilidad. Esta limitación puede obstaculizar la capacidad de una organización para adaptarse rápidamente a las condiciones cambiantes del mercado, adoptar nuevas tecnologías y colaborar de manera efectiva a través de varios sistemas y plataformas.

No lograr la modernización de las aplicaciones puede dar lugar a aplicaciones subutilizadas o licencias de software no utilizadas, lo que genera ineficiencias, un menor retorno de la inversión (ROI) y posibles oportunidades perdidas para que las empresas maximicen sus inversiones tecnológicas.

Aproximadamente el 49,96 % de todo el software instalado permanece sin utilizar por parte de los empleados.. Esta falta de utilización conduce a una pérdida anual que supera los 500 millones de dólares estadounidenses (537 millones de dólares) en recursos de software desperdiciados.

Beneficios de la modernización de aplicaciones

La Autoridad de Conducta Financiera (FCA) ha presentado una informe lo que ilustra que un asombroso 92% de las empresas de servicios financieros (FS) del Reino Unido persisten en su dependencia de la tecnología heredada. Además, la FCA divulgó que un importante 78 % de los datos de las empresas de servicios financieros todavía se conservan en entornos locales.

Sobre la gestión de la tecnología heredada, GOBIERNO REINO UNIDO afirma que la tecnología puede volverse heredada debido a una o más de las siguientes razones: ahora se considera un producto al final de su vida útil, ya no es compatible con el proveedor, es imposible de actualizar, ya no es rentable o ha superado el riesgo aceptable. límite.

La necesidad de actualizar sistemas de software anticuados se hace más evidente a medida que la transformación digital y la adopción digital persisten en remodelar la creación de valor dentro del ámbito empresarial.

Reflexionando sobre este hecho, es fundamental profundizar en las numerosas ventajas de la modernización de aplicaciones. Algunos de estos beneficios clave incluyen:

Eficiencia incrementada: La modernización de las aplicaciones permite a las empresas optimizar sus procesos, reducir las redundancias y automatizar tareas repetitivas, lo que conduce a una mejor productividad y utilización de recursos.

Seguridad mejorada: Los sistemas de software actualizados vienen con mejores características de seguridad y protecciones contra amenazas cibernéticas, lo que garantiza la seguridad de los datos confidenciales y reduce el riesgo de infracciones.

Flexibilidad mejorada: Las aplicaciones modernas suelen ser más adaptables y escalables, lo que permite a las empresas responder rápidamente a las demandas cambiantes del mercado y capitalizar nuevas oportunidades.

Ahorro de costes: Al reemplazar los sistemas heredados con soluciones más eficientes y rentables, las empresas pueden reducir los gastos operativos y lograr un mejor retorno de la inversión.

Mejor experiencia del cliente: La modernización de aplicaciones permite a las organizaciones brindar servicios más rápidos, confiables y fáciles de usar, lo que puede generar una mayor satisfacción y lealtad del cliente.

Integración más fácil: Los sistemas de software modernos suelen estar diseñados para ser más compatibles con otras aplicaciones y plataformas, lo que facilita una integración y colaboración perfectas en toda la organización.

Capacidades nativas de la nube: La modernización de las aplicaciones permite a las empresas aprovechar las tecnologías nativas de la nube, proporcionando mayor flexibilidad, escalabilidad y optimización de costos al aprovechar la infraestructura y los servicios basados ​​en la nube.

Mayor innovación: La modernización de aplicaciones fomenta una cultura de innovación al permitir que las organizaciones adopten tecnologías y prácticas de vanguardia, garantizando que permanezcan a la vanguardia de su industria.

Evaluaciones para la modernización de aplicaciones

El proceso de modernización de las solicitudes comienza con la realización de una evaluación integral de la solicitud. Este paso crucial implica revisar sistemáticamente toda su cartera de software y establecer criterios bien definidos para determinar qué aplicaciones justifican la modernización.

Esta evaluación abarca varios factores y debe incluir la determinación de lo siguiente:

Requerimientos técnicos: Determine las actualizaciones y mejoras necesarias para que cada aplicación satisfaga de manera efectiva las necesidades comerciales actuales y futuras.

Espectro de dificultad: Evalúe la complejidad y los desafíos asociados con la modernización de aplicaciones específicas (especialmente aquellas de alto valor), teniendo en cuenta factores como las dependencias, la arquitectura heredada y los recursos disponibles.

Compatibilidad con la nube: Evaluar la idoneidad de cada aplicación para la migración a la nube, considerando factores como rendimiento, escalabilidad y requisitos de seguridad.

Aplicaciones de alto valor: Identifique aplicaciones de misión crítica que pueden afectar significativamente las operaciones comerciales y el retorno de la inversión cuando se modernicen, priorizándolas en la hoja de ruta de modernización.

Impacto del retorno de la inversión: Analice el posible retorno de la inversión para modernizar cada aplicación, considerando factores como ahorro de costos, mayor eficiencia y crecimiento de los ingresos.

Previsión de valor: Calcule el valor previsto de modernizar cada aplicación evaluando las mejoras en los procesos comerciales, la experiencia del cliente y la ventaja competitiva.

Evaluación de riesgos: Identifique riesgos y desafíos potenciales involucrados en el proceso de modernización, como problemas de migración de datos, complejidades de integración y posibles tiempos de inactividad.

También es esencial desarrollar una hoja de ruta de modernización de aplicaciones que describa los posibles KPI para la modernización heredada. Sin embargo, establecer estrategias rígidas puede no ser el mejor camino para los equipos de modernización que requieren flexibilidad para adaptarse a requisitos cambiantes y desafíos imprevistos.

En cambio, adoptar un enfoque más ágil que se centre en el progreso iterativo, la mejora continua y la colaboración puede ayudar a los equipos de modernización a navegar las complejidades del proceso sin dejar de ser receptivos.

Exploración de patrones en la modernización de aplicaciones

Se pueden observar varios patrones reconocidos para la modernización de aplicaciones, centrados en una variedad de estrategias, tecnologías y enfoques distintos. Estos consisten en lo siguiente:

Levantar y cambiar (rehospedaje): esta táctica implica migrar una aplicación a una nueva infraestructura con modificaciones mínimas o nulas en la aplicación en sí, como la transición de servidores locales a la nube. Aunque suele ser más rápido y rentable, es posible que sólo aproveche parcialmente los beneficios de las tecnologías modernas.

Adaptación de plataforma (Replatforming): Esta estrategia requiere cambios menores en la aplicación para aprovechar las nuevas plataformas y al mismo tiempo preservar su funcionalidad principal. Los ejemplos incluyen la adopción de contenedores o el uso de una solución de plataforma como servicio (PaaS). El cambio de plataforma puede mejorar la escalabilidad, la flexibilidad y la mantenibilidad sin una revisión total.

Optimización de código (Refactorización): este método se centra en rediseñar y recodificar partes de una aplicación para mejorar su diseño, estructura y rendimiento. Permite a las organizaciones aprovechar tecnologías modernas como microservicios y arquitectura sin servidor. Los microservicios permiten que aplicaciones grandes y estrechamente acopladas (monolitos) se descompongan en servicios independientes más pequeños que se pueden desarrollar, implementar y escalar de forma independiente, lo que los convierte en uno de los principales motivadores para buscar la modernización de las aplicaciones.

Redesarrollo de aplicaciones (Reconstrucción): Este enfoque implica rediseñar y desarrollar completamente una aplicación utilizando tecnologías, marcos y mejores prácticas contemporáneas. La reconstrucción ofrece la oportunidad de abordar problemas heredados e incorporar nuevas funciones, pero exige importantes inversiones de tiempo y recursos.

Sustitución de software (Reemplazo): En algunos casos, reemplazar una aplicación heredada con una nueva solución disponible en el mercado o personalizada que cumpla con los requisitos comerciales actuales y futuros puede ser más eficiente y rentable. Este método puede proporcionar acceso instantáneo a funciones y capacidades modernas, pero puede requerir grandes esfuerzos de integración y migración de datos.

Enfoque híbrido: Muchas organizaciones eligen un sistema híbrido que combina elementos de las estrategias antes mencionadas. Por ejemplo, una organización podría realojar ciertas partes de una aplicación en la nube, refactorizar…