Cuando era más joven, Anakin Skywalker fue uno de los Caballeros Jedi más poderosos que sirvió en la Orden Jedi. Bajo la dirección de Obi-Wan Kenobi, Skywalker fue un general en las Guerras Clon, donde recibió muchas aclamaciones de sus compañeros y superiores. Todo esto cambió cuando Skywalker cayó al lado oscuro de la Fuerza, sufriendo una transformación en uno de los Señores Sith más poderosos que jamás haya existido: Darth Vader.
Por el resto de su vida, Darth Vader serviría al Imperio Galáctico; aniquilando a los Jedi restantes, estableciendo un gobierno imperial e intentando aplastar a la Alianza Rebelde que se formó como resultado. Mientras tanto, Vader perfeccionó sus reconocidos talentos para la Fuerza, el pilotaje y el combate con sables de luz para servir la voluntad del oscuro Emperador Palpatine, dándole la espalda a todo lo que una vez representó.
Vader era respetado y temido en todas las filas del Ejército Imperial (sin mencionar el resto de la galaxia), y después de escuchar sobre sus hazañas de fuerza y habilidad brutas, es fácil entender por qué.
El antiguo aprendiz de Obi-Wan Kenobi alcanzó un nivel de infamia sólo superado por el propio Emperador, y lo hizo cazando y matando a los Jedi supervivientes y aterrorizando a la Alianza Rebelde, superando grandes obstáculos en el proceso…
Aunque Darth Vader finalmente se redimiría al final de El regreso del Jedi (1983), esto sólo ocurrió después de más de veinte años de suprimir lo que quedaba de Anakin Skywalker. Un primer ejemplo de esto ocurrió justo después de que Vader luchara contra el Jedi superviviente Kirak Infil’a por su sable de luz (más sobre esto más adelante).
Una vez que reclamó el arma, le dijeron a Vader que fuera a Mustafar para hacer que el cristal kyber del interior “sangrara”, es decir, vertiendo toda su rabia y odio en él para que se corrompiera y produjera una espada roja. Mientras Vader hacía esto, la energía dentro del cristal lo obligó a alucinar una serie diferente de eventos para disuadirlo de sangrar (el cristal kyber era un ser sensible, por supuesto).
Dentro de la visión, Vader le dio la espalda al lado oscuro viajando a Coruscant y matando al Emperador Palpatine. Una vez hecho esto, encontró a Obi-Wan Kenobi y le pidió perdón por las atrocidades que había cometido. Todo pareció ir bien por un momento, hasta que Obi-Wan se refirió a él como “Anakin”, lo que enfureció a Vader lo suficiente como para descartar las alucinaciones por completo y completar el proceso de sangrado.
Este sería el primer rechazo de Vader al bien que queda dentro de él, pero ciertamente no sería el último. Por el momento, Darth Vader fue consumido por el lado oscuro de la Fuerza.
Pero al menos consiguió un nuevo y brillante sable de luz rojo, así que eso es una ventaja.