Uno de los sospechosos más recientes en el caso fue el de William J. Smith, quien fue presentado en 2018 como un hombre que tenía toda la experiencia necesaria, junto con un rencor y una carga financiera únicos. Smith era otro veterano de la Segunda Guerra Mundial que tenía formación y experiencia en aviones y saltos en paracaídas.
Después de su carrera militar, William se convirtió en trabajador ferroviario antes de perder su trabajo y toda su pensión como resultado de la quiebra de su ferrocarril en 1970. Esto dejó a Smith, al igual que Joe Lakich, con un enorme rencor, así como una repentina necesidad de efectivo. Una de las conexiones más interesantes encontradas fue que uno de sus amigos del instituto que murió en la Segunda Guerra Mundial se llamaba Ira Dan Cooper, lo que podría explicar el seudónimo utilizado por el secuestrador.
La teoría sobre Smith era que cometió el delito sólo para usar su conocimiento del ferrocarril para lanzarse en paracaídas y aterrizar cerca de algunas vías del tren antes de viajar como polizón en un tren para escapar sin ser detectado. Smith también tiene un parecido notable con el boceto del testigo de DB Cooper.